IMPULSANDO LA PROSPERIDAD:
CÓMO LOS PAÍSES HAN UTILIZADO LA INDUSTRIA PETROLERA PARA FORTALECER SUS
ECONOMÍAS
Más allá del barril: cómo
las naciones han aprovechado la industria petrolera para el crecimiento
económico
Convertir el petróleo en
riqueza: qué pueden enseñarnos otros países
Petróleo y poder económico:
lecciones de países que lo hicieron bien
La ventaja del petróleo:
cómo los países han convertido el oro negro en fortaleza económica
Para comprender
en profundidad la evolución de la industria petrolera venezolana, es esencial
analizar los logros alcanzados por otros países, evaluando cómo han gestionado
sus sectores energéticos y el impacto de estas políticas en sus economías y
calidad de vida.
La sostenibilidad de la
industria no depende únicamente de la riqueza del subsuelo, sino también de una
gestión eficiente, de la implementación de políticas adecuadas y de la
capacidad para impulsar sectores complementarios dentro del aparato productivo nacional.
En este contexto, se
presenta un análisis del gráfico histórico de la producción de petróleo en
Venezuela (1917-2023), organizado en cuatro fases clave: 1917-1970, 1970-1989,
1989-1998 y 1998-2023. Este estudio pretende aportar elementos que contribuyan a
la reconstrucción, recuperación y crecimiento sostenido de la industria en el
inicio del segundo cuarto del siglo XXI.
Dentro del plan de María
Corina Machado para transformar Venezuela, se presentan propuestas concretas
para la recuperación, el crecimiento y la sostenibilidad de la industria
petrolera venezolana.
IMPULSANDO LA PROSPERIDAD: CÓMO LOS
PAÍSES HAN UTILIZADO LA INDUSTRIA PETROLERA PARA FORTALECER SUS ECONOMÍAS
Los siguientes gráficos muestran los niveles de producción de algunos de los países productores de petróleo más importantes del mundo durante la segunda mitad del siglo XX.
Annual Energy Review 2006
Gráfico de los países mayores productores de
petróleo entre los años 1960 y 2006
IRÁN
En años del período
1970–1980, alcanzó niveles de producción alrededor de los 5 millones de
barriles diarios.
ANTIGUA UNIÓN SOVIÉTICA
Entre los años 1980 y 1990
mantuvo una producción cercana a los 12 millones de barriles diarios de
petróleo.
ARABIA SAUDITA
Para el año 1982, la
producción de Arabia Saudita estuvo alrededor de los 10 millones de barriles de
petróleo al día. Entre 2000 y 2020 mantuvo una producción constante,
consolidándose como uno de los principales exportadores de petróleo. En abril
de 2020, alcanzó un máximo histórico de 12 millones de bpd. En 2023, Arabia Saudita produjo alrededor de
11,4 millones de bpd, representando aproximadamente el 11% del suministro
mundial de crudo.
El petróleo es fundamental
para la economía de Arabia Saudita, representando una porción significativa de
sus ingresos por exportaciones. Según datos de Trading Economics, en septiembre
de 2024, las exportaciones de productos petroleros constituyeron el 70,7% del
total de exportaciones del país. A pesar de las iniciativas de diversificación
económica, el petróleo sigue siendo la principal fuente de ingresos por
exportaciones para Arabia Saudita.
ESTADOS UNIDOS
Entre 1965 y 1990, la
producción de los Estados Unidos estuvo por encima de los 8 millones de
barriles diarios de petróleo. La década de 2010 marcó un auge en la producción.
En 2019, Estados Unidos alcanzó una producción promedio de 12,3 millones de
barriles por día (bpd), superando a Arabia Saudita y Rusia para convertirse en
el mayor productor mundial de petróleo.
En la década de 2020, a
pesar de desafíos como la pandemia de COVID-19, la producción continuó en
aumento. En 2023, se registró un promedio récord de 12,9 millones de bpd, con
un pico mensual en diciembre de más de 13,3 millones de bpd.
La producción de petróleo y gas de esquisto reimpulsa a los Estados Unidos como líder del mercado energético
RUSIA:
Década de 2000: Tras la
disolución de la Unión Soviética, Rusia revitalizó su industria petrolera, incrementando
su producción y exportaciones.
En 2017, Rusia fue el país
con mayor producción de crudo. Sin embargo, desde entonces, el crecimiento de
su producción ha disminuido. En 2023, Rusia mantuvo una producción cercana a
los 9 millones de bpd, representando también el 11% del suministro mundial de
crudo.
Las exportaciones de
petróleo y gas son fundamentales para la economía rusa, representando una
porción significativa de sus ingresos por exportaciones y del presupuesto
federal. Según datos de Trading Economics, los ingresos por ventas de petróleo
crudo, productos derivados del petróleo y gas natural constituyen
aproximadamente la mitad del presupuesto federal de Rusia.
En términos de exportaciones
totales, el petróleo y el gas representan una parte considerable. Por ejemplo,
en 2022, las exportaciones de petróleo generaron ingresos superiores a los
133.000 millones de dólares, mientras que las de gas natural alcanzaron
aproximadamente 71.500 millones de dólares. Además, la industria petrolífera es
una de las mayores fuentes de empleo en Rusia, y los impuestos aplicados a las
compañías energéticas constituyen una fuente principal de ingresos para los
organismos públicos del país.
En resumen, las
exportaciones de petróleo y gas no solo son cruciales para el comercio exterior
de Rusia, sino que también desempeñan un papel esencial en la financiación del
presupuesto federal y en el sostenimiento de la economía nacional.
En conjunto, para 2023,
Estados Unidos, Arabia Saudita y Rusia aportaron aproximadamente el 40% de la
producción mundial de petróleo, sumando un total de 32,8 millones de bpd.
NORUEGA
La producción de petróleo ha
sido un pilar fundamental en la economía de Noruega desde el descubrimiento de
yacimientos en el Mar del Norte en la década de 1960. Este hallazgo transformó
al país en uno de los principales exportadores de petróleo y gas natural a
nivel mundial, impulsando su desarrollo económico y elevando significativamente
el nivel de vida de sus habitantes.
Campo
Johan Sverdrup
Es importante recalcar que
el nivel de vida, de desarrollo económico y social alcanzado por la sociedad
noruega, nunca dependió, ni ha dependido, de su industria petrolera. De la
misma manera en que el desarrollo económico de sus vecinos, Suecia, Finlandia y
Dinamarca, su desarrollo siempre se basó en el fortalecimiento de las diversas
áreas de su economía en las diferentes regiones de su geografía.
Su desarrollo,
adicionalmente a los recursos naturales, se ha basado en el trabajo,
logrando con ello, disfrutar de los más altos niveles de calidad de vida del
planeta. Según reporta el estado noruego, más del 90% de la totalidad de
las ganancias provenientes de la renta petrolera, es decir, más de un
trillón de dólares, forma parte del Fondo Global de Pensiones del Gobierno, no
para usarse en la actualidad, sino para reservarlo para las pensiones de las
futuras generaciones.
A diferencia de otras
naciones dependientes de recursos naturales, Noruega implementó una gestión
prudente de sus ingresos petroleros. Estableció el Fondo de Pensiones del
Gobierno de Noruega, conocido como el fondo soberano más grande del mundo, que
invierte las ganancias del petróleo en una amplia gama de activos globales.
Este enfoque ha permitido al país acumular reservas financieras significativas,
asegurando la sostenibilidad de su estado de bienestar y protegiendo la
economía de las fluctuaciones en los precios del petróleo.
Además, Noruega ha utilizado
los ingresos del petróleo para diversificar su economía, invirtiendo en
sectores como la educación, la investigación y las energías renovables. Este
enfoque ha fomentado la innovación y ha reducido la dependencia del país en el
sector petrolero, promoviendo una economía más equilibrada y resiliente.
Sin embargo, esta
dependencia también presenta desafíos. La disminución prevista en la producción
de yacimientos clave, como Johan Sverdrup, y la creciente presión internacional
para reducir las emisiones de carbono, plantean interrogantes sobre el futuro
de la industria petrolera noruega. A pesar de su compromiso con prácticas
sostenibles y la promoción de vehículos eléctricos, Noruega enfrenta críticas
por continuar otorgando licencias para nuevos proyectos de combustibles
fósiles.
En resumen, la producción de
petróleo ha sido esencial para el desarrollo económico de Noruega, pero el país
ha demostrado una gestión ejemplar de sus recursos, enfocándose en la
sostenibilidad y la diversificación económica para asegurar su prosperidad a
largo plazo.
Energías limpias en Noruega
Desde finales de los años
1800, Noruega ha generado la mayor parte de su electricidad a partir de energía
hidroeléctrica. Lo mismo ocurre hoy. Más del 99% de la producción de
electricidad en la parte continental de Noruega proviene de plantas hidroeléctricas.
Aunque en Noruega la energía
hidroeléctrica es dominante, la planificación de los procesos productivos y de
servicios no se enfoca únicamente en sus necesidades básicas inmediatas, sino
también en el máximo aprovechamiento de todas las oportunidades y potencialidades
que ofrece su país, así como en la capacidad innovadora de su gente, para en
este caso, desarrollar otras energías renovables y las tecnologías para
hacerlas funcionar a su nivel óptimo. Las empresas noruegas son pioneras
en tecnologías en otras áreas: la energía solar, la energía marina, producción
de bioenergía a partir de la madera, y el almacenamiento de energía.
En Noruega, como parte de la
dirección estratégica de Hydro de fortalecer su posición en el aluminio bajo en
carbono y explorar nuevas oportunidades de crecimiento dentro de nuevas fuentes
de energía, se estableció una compañía de hidrógeno verde a principios de 2021
que permitirá el cambio de gas a hidrógeno basado en energías renovables en
varios de los complejos de aluminio de Hydro, además de desarrollar y atender
el mercado externo.
PAÍSES ÁRABES, miembros de
la OPEP como lo es Venezuela, también han utilizado las ventajas asociadas a la
tenencia de energía eléctrica a muy bajo costo, para irrumpir muy agresivamente
en el negocio del aluminio. Entre ellos podemos mencionar Bahrain, Dubai y Arabia
Saudita.
The Gulf Aluminium
Industry: A legacy of 5 successful decades, 6 aluminium smelters
BAHRAIN
Este es un país productor de
petróleo que ha utilizado sabiamente ese potencial para diversificar su
economía incorporando una muy importante industria del aluminio. Para tal fin,
utilizan gas para la producción de energía, la que es aprovechada para la
electrólisis de aluminio.
Es importante hacer notar
que Bahrain no posee reservas de bauxita, por lo que está en desventaja con
respecto a países como el nuestro para la producción competitiva de aluminio,
no obstante, su producción alcanza 1.500.000 toneladas de aluminio al año.
EMIRATOS ÁRABES UNIDOS
Tal vez, el mejor ejemplo de
un país productor de petróleo que ha sabido sembrar su petróleo son los
Emiratos Árabes Unidos, realidad que se refleja en valores tales como una muy
baja tasa de desempleo del 2,4%, y un PIB per cápita que resulta ser el cuarto
mejor del mundo.
Lo más notable de este caso,
es que ellos, al igual que nosotros en Venezuela, han desarrollado su propia
tecnología de reducción de aluminio, ya que entendieron el enorme potencial que
el aluminio ofrece para diversificar su economía y beneficiar a sus habitantes.
Mas aún, ellos han
construido varias líneas de producción usando muy orgullosamente su tecnología
propia, y ese país tradicionalmente petrolero, adelantó un Plan Nacional que
elevó la producción de aluminio a 2.600.000 toneladas al año.
Esta estrategia ha recibido
un fuerte apoyo del gobierno de los Emiratos Árabes Unidos, que colabora
estrechamente con sus técnicos para transformar el sector del aluminio en una
industria de clase mundial. Creen firmemente que el desarrollo de tecnologías
propias y su escala masiva son la clave para lograr la soberanía productiva, un
plan que recuerda las iniciativas llevadas a cabo en Venezuela desde la década
de 1990 hasta 2005.
The impact of the aluminium sector on the UAE economy
EVOLUCIÓN HISTÓRICA DE LA PRODUCCIÓN DE PETRÓLEO
VENEZUELA - PERÍODO (1917-2023)
Período 1940-1970
Con las compañías petroleras
multinacionales, Venezuela incrementó en forma sostenida su producción de
petróleo, la cual se observa en la tendencia positiva que va desde el año 1940
hasta el pico histórico del año 1970.
Esta decisión generó como
consecuencia los mejores niveles de vida disfrutados por la sociedad venezolana
en toda su historia, y por ende, el mejor posicionamiento en cuanto a los
derechos humanos fundamentales.
Período 1970-1989
Un cambio de política
durante el gobierno del presidente Rafael Caldera en 1970 marcó el fin de la
tendencia positiva de crecimiento de la producción, conduciendo a un declive
hasta 1989.
Venezuela, además de no haber planificado un nivel de producción de petróleo adecuado a sus posibilidades y necesidades, cargó con los porcentajes más altos de recortes de producción de petróleo entre los países miembros de la OPEP, con las graves consecuencias que esto trajo al país.
Adicionalmente es importante
considerar la Producción per cápita, ya que con el crecimiento de la población
se diluyen los beneficios en la economía de una producción petrolera que no se
incrementa, siendo esto aún peor para una producción decreciente.
Durante este período, el
país enfrentó varios desafíos relacionados con su industria petrolera y su
impacto en la economía:
Falta de una planificación
adecuada de la producción:
En los años 70, los altos
precios del petróleo llevaron a una expansión del gasto público sin una
estrategia clara para manejar posibles caídas de precios. Tras la nacionalización del petróleo en 1976,
Venezuela no logró optimizar su capacidad de producción ni diversificar su
economía de manera efectiva.
Altos recortes de producción impuestos por la OPEP:
Venezuela, como miembro de
la OPEP, tuvo que ajustarse a cuotas de producción que a menudo le imponían
recortes significativos. Mientras otros países miembros lograban evadir o
minimizar estos recortes, Venezuela asumió una carga desproporcionada,
afectando sus ingresos.
Producción per cápita en declive:
La producción petrolera en
el país disminuye, pasando de 3,7 millones en el año 1970 hasta que, en el año
1984, la producción no llega a 2 millones de barriles diarios.
Los niveles de producción en
la década de los años ochenta muestran valores inferiores a los niveles de
producción observados durante la década de los años cincuenta.
Durante el período
1970-1989, la producción petrolera se redujo mientras la población venezolana
aumentó, lo que ocasionó una disminución en el beneficio per cápita derivado de
la renta petrolera.
Estos datos reflejan un
crecimiento constante de la población venezolana durante la segunda mitad del
siglo XX. Por ejemplo, en 1950, la población era de aproximadamente 5,5
millones de habitantes, mientras que para el año 2000 había aumentado a más de
24 millones.
Este fenómeno se hizo más
crítico en la década de los 80, cuando la caída de precios del petróleo, aunada
a una producción limitada y al mal manejo de la economía, entre otros factores,
afectó seriamente el poder adquisitivo de la población y la economía del país.
Período 1989-1998
Crecimiento sostenido
implementado por el gobierno del presidente Carlos Andrés Pérez en 1989, hasta
el año 1998.
Gracias al Programa de
Desarrollo que el Dr. Miguel Rodríguez, como ministro de Planificación, diseñó
e implementó en el año 1989, fue posible en conjunto con Andrés Sosa Pietri, presidente
de Petróleos de Venezuela, lograr la única tendencia de crecimiento sostenido
de la producción de petróleo alcanzada por el Estado venezolano en la historia
de la producción petrolera. En el gráfico, período 1989-1998.
Período 1999-2023
CAÍDA DE LA PRODUCCIÓN Y COLAPSO DE LA INDUSTRIA PETROLERA
CONCLUSIONES
Venezuela nunca contó con
visionarios sobre el manejo de la industria petrolera como soporte para el
desarrollo sostenible. Una gerencia con visión de sostenibilidad ha podido
contribuir de manera significativa y determinante con el fortalecimiento y
consolidación de la democracia en Venezuela durante el siglo XX.
Con unos 300.000 millones de barriles de crudo, Venezuela posee las mayores reservas de petróleo del mundo, por delante de Arabia Saudita, con unos 260.000 millones de barriles. Sin embargo, la industria petrolera del país ha sufrido un dramático declive.
Histórico de las
exportaciones de petróleo venezolanas en comparación con el total de las exportaciones
Antes del año 2000, el
petróleo representaba la inmensa mayoría de las exportaciones venezolanas. En
las décadas de 1950-1970 Venezuela era uno de los principales exportadores de
petróleo del mundo, con la producción dominada por concesiones a empresas
extranjeras hasta la nacionalización de 1976. El petróleo representaba más del
90% de las exportaciones totales. El auge petrolero permitió el desarrollo de
infraestructura y programas sociales, pero también generó dependencia
económica.
Nacionalización del petróleo
(1976)
La creación de Petróleos de
Venezuela S.A. (PDVSA) consolidó el control estatal de la industria. Aunque
hubo intentos de diversificación, el petróleo siguió representando entre el 80%
y 90% de las exportaciones.
Década de 1980-1990
En los 90 se implementaron
políticas de apertura petrolera para atraer inversión extranjera. A pesar de
intentos de diversificación, el petróleo siguió representando alrededor del
80%-85% de las exportaciones.
En el año 1999 Hugo Chávez
asumió la presidencia e inició cambios en la industria petrolera.
Para finales de los 90, las
exportaciones de petróleo aún representaban aproximadamente 80%-90% del total. El
país dependía fuertemente de las exportaciones de crudo y derivados, con
Estados Unidos como su principal comprador.
En conclusión, antes del año
2000 el petróleo representaba al menos el 80% y en algunos períodos, más del
90% de las exportaciones venezolanas, consolidando la dependencia estructural
del país en la renta petrolera.
Desafortunadamente, en
Venezuela no se realizó la debida planificación del sector petrolero, que era
aumentar los niveles de producción a valores cercanos a los 10 millones de
barriles de petróleo al día. Las reservas de petróleo de Venezuela han estado entre
las más altas del mundo, por lo que, sin ninguna duda justificaban, junto a las
crecientes necesidades de la población, altos niveles de producción.
El Dr. Miguel Rodríguez en conjunto con el presidente de Petróleos de Venezuela, PDVSA, Andrés Sosa Pietri, hicieron posible lograr la única tendencia de crecimiento sostenido de la producción de petróleo alcanzada por el Estado venezolano en la historia de la producción petrolera, gracias al Programa de Desarrollo diseñado e implementado por el Dr. Miguel Rodríguez en el año 1989.
BREVE HISTORIA DEL DR. MIGUEL RODRÍGUEZ
Dr. Miguel Rodríguez, Ministro de Planificación durante el segundo gobierno del Presidente Carlos Andrés Pérez
Como
parte del Programa de Desarrollo, el Dr. Miguel Rodríguez introdujo al Congreso Nacional en 1991, la
creación del Fondo de Estabilización Macroeconómica, el Fondo Soberano de
Venezuela, antes de que Noruega introdujera en el Congreso, y aprobara los
recursos para su fondo.
“La vida del petróleo es la volatilidad de los
precios por eso debíamos tener un fondo de estabilización macroeconómica que se
convirtiera en un fondo soberano, no discrecional como el del Fondo de
Inversiones de Venezuela, sino un fondo paramétrico que esterilizara los
aumentos de precios a partir de un precio razonable del petróleo que inyectara
en la economía los proventos derivados solamente del aumento de la producción
petrolera”.
La falta de la debida
planificación de la producción de petróleo en el periodo analizado generó, y
fue acentuando en el tiempo, un mayor perjuicio en las condiciones de vida de
las personas más necesitadas, dado el alto grado de dependencia de la economía
de los ingresos provenientes de la renta petrolera.
Un mayor ingreso producto de
las ventas de una mayor producción de petróleo, muy fácilmente ha podido
apalancar un desarrollo más eficiente de otros sectores productivos, como lo
han hecho, por ejemplo, los Emiratos Árabes Unidos. De igual forma pudo contribuir
en las mejoras de las condiciones de vida (incluidas la vivienda, la seguridad
alimentaria, la salud y la educación), lo que en última instancia se traduciría
en una mayor calidad de vida.
PROPUESTAS DE MARÍA CORINA MACHADO PARA LA RECUPERACIÓN, CRECIMIENTO, Y SOSTENIBILIDAD DE LA INDUSTRIA PETROLERA VENEZOLANA
LA PROPUESTA DE MARÍA CORINA PARA TRANSFORMAR VENEZUELA
Líder opositora venezolana.
Ingeniero industrial con Especialización en Finanzas del IESA y graduada del
Programa de Líderes Mundiales en Políticas Públicas de la Universidad de Yale,
en Estados Unidos.
Un “extenso programa de
privatización” del sector petrolero es una de las principales propuestas de
María Corina Machado, quien asegura que, de esta manera, se
recuperará la producción y Venezuela pasará a ser el “hub” energético
“de las Américas”, al convertirse en un “proveedor estable, seguro y
confiable”.
La privatización, a su
juicio, satisfará “necesidades perentorias de la población”, mejorará
los salarios y las condiciones laborales de los trabajadores
petroleros y permitirá una “generación de empleo”, ya que las empresas requerirán
de “ingenieros, técnicos, empleados y obreros” venezolanos.
Privatización y reactivación
de la producción petrolera y de gas con atracción de empresas
internacionales y nacionales especializadas. Venezuela es uno de los países con
mayores reservas tanto de petróleo como de gas natural en el mundo.
La Organización de Países Exportadores de
Petróleo y la Agencia Internacional de Energía reconocen reservas por más de
300 mil millones de barriles de petróleo y 200 billones de pies cúbicos de gas
natural. El objetivo es aumentar de manera sostenida la producción petrolera y
de gas para aprovechar la ventana de oportunidad que existe de demanda mundial
de hidrocarburos.
Para lograr este objetivo se
requerirá grandes inversiones que el Estado venezolano no puede hacer. La
atracción de capitales privados es la solución, y la estrategia para lograrlo
es la privatización.
Se privatizarán todas las
actividades productivas de la industria que sea aconsejable para lograr
inversiones privadas masivas y el incremento sostenido de la producción con
condiciones que garanticen seguridad jurídica y un entorno atractivo para los
inversionistas.
El Estado seguirá recibiendo
recursos fiscales en forma de regalías y de impuestos, y asegurará las
condiciones para que las empresas privadas incrementen la producción en el más
corto plazo posible.
Se establecerá una Agencia
Venezolana de Energía y Petróleo que asumirá la función reguladora de la
industria. La privatización petrolera hará que Venezuela recupere su condición
de abastecedor seguro y confiable para sus clientes y brinde inmejorables oportunidades
de inversión en la industria.
Programa amplio de
privatización de empresas y activos públicos para deslastrar al
Estado de cientos de actividades empresariales ineficientes que sobrecargan la
estructura del sector público y le cuestan a la Nación inmensos recursos en
forma de subsidios.
La urgencia y necesidad de este programa están motivadas por el elevado número de entidades públicas de índole empresarial actualmente en manos del Estado venezolano, resultado de las numerosas estatizaciones principalmente a partir de 2007 y la desordenada creación de nuevas entidades públicas.
Prácticamente todas estas
entidades, hoy bajo control estatal, se encuentran en una situación financiera
extremadamente precaria, con notables deficiencias técnicas y operativas.
Los recursos obtenidos por
el programa de privatización serán empleados en el programa masivo de inversión
para reactivar el crecimiento económico, aumentar el bienestar de la población
e incrementar la capacidad productiva de la economía.
Un eficiente y transparente
proceso de privatización de empresas mal administradas, siguiendo las mejores
prácticas internacionales, permitirá un cambio sustantivo en la composición del
gasto público, la activación productiva y la generación de mayores ingresos
tributarios.
El programa busca alcanzar
cuatro objetivos fundamentales:
Primero,
optimizar el uso de las empresas y activos en manos del Estado para mejorar
tanto la cantidad como la calidad de los bienes y servicios que ofrecen,
mediante su transferencia al sector privado, que aportará capital, gestión y
tecnología a estas entidades.
Segundo,
mejorar la gestión del balance financiero de la República. El país tiene una
significativa deuda externa, por la cual se pagan intereses considerables,
mientras que existen empresas y activos valiosos que no se están aprovechando
debidamente. Un programa de privatización como el propuesto puede contribuir
sustancialmente a un balance financiero más sólido.
Tercero,
contribuir al equilibrio de las cuentas fiscales y, por ende, a la estabilidad
macroeconómica y al crecimiento económico. Las empresas públicas representan
una importante fuga de fondos públicos que son escasos y que son necesarios
para atender múltiples demandas urgentes.
Cuarto,
permitir la concentración de la gestión y administración pública en asuntos que
son intransferibles o indelegables para el Estado. Se considerarán igualmente
opciones de gestión privada de servicios públicos en los casos que lo ameriten.
MEDIANO Y LARGO PLAZO
Venezuela será el Hub Energético de las Américas, con impacto mundial, a través de una combinación de energías provenientes de los abundantes recursos de hidrocarburos, y de los cuantiosos recursos energéticos renovables.
El país volverá a ser un jugador
de primer orden en la producción y refinación de hidrocarburos apoyado en
la privatización de la industria petrolera y gasífera.
Adicionalmente, se
recuperarán y desarrollarán los inmensos recursos de energías renovables
hidroeléctrica, solar, eólica, y las aplicaciones energéticas del hidrógeno
para, en conjunto con la producción petrolera y de gas, posicionar al país como
el gran centro de energía continental y global.
En especial, respecto a las
fuentes de energía renovables, se rescatará de manera prioritaria el
potencial de producción hidroeléctrica del país para aumentar la
contribución de esta energía limpia y sostenible al consumo eléctrico nacional
y para su exportación.
El sistema hidroeléctrico
del bajo Caroní (Guri, Macagua, Caruachi) tienen una capacidad instalada total
de aproximadamente 15.000MW, y junto con el resto de las hidroeléctricas, suman
un total de 17.000MW. Adicionalmente, la central de Tocoma no se ha completado
después de muchos años de construcción. Se valorará la terminación de esta
central que podría aportar más de 2.000MW adicionales de energía limpia.
La demanda máxima del país,
alcanzada en 2013, podría ser atendida casi en su totalidad por la generación
hidroeléctrica instalada actualmente. Sin embargo, el sistema produce
aproximadamente la mitad de su capacidad, por falta de inversión, mantenimiento
y gerencia. El rescate del sistema hidroeléctrico de Venezuela será una
prioridad del Estado para asegurar una matriz energética limpia a nivel
nacional.
Venezuela cuenta con grandes oportunidades de aprovechar la energía solar y eólica en extensas áreas del país. Se incentivará la inversión privada en estas energías para aumentar su contribución a la matriz energética nacional.
Igualmente se incentivará la
investigación y la inversión en la producción de hidrógeno con aplicaciones
energéticas. Con un esfuerzo de inversión masiva en energía por parte del
sector privado y el Estado, Venezuela podría superar los 75.000MW solo con
hidroelectricidad y energía eólica (como se detalla más adelante en este
programa), una cifra varias veces superior al consumo nacional.
En adición a la capacidad de
generación de energía limpia, Venezuela tiene un potencial de cerca de 20.000MW
de generación térmica, que por sí sola podría abastecer igualmente al país
holgadamente, aunque en la actualidad solo un 10% está operativa y disponible.
El conjunto de fuentes de
generación eléctrica permitiría convertir a Venezuela en un centro de
exportación de energía con fuentes renovables a los países de la región. Como
punto de comparación, la demanda de energía del país pasó de un pico de
18.600MW en 2013 a cerca de 12.400MW actualmente como consecuencia de la
depresión económica.
El crecimiento de la
economía, como resultado del plan de expansión que se propone en este programa,
hará crecer la demanda de energía. Sin embargo, el potencial de generación
energética total del país abastecerá toda la demanda, y dejará un excedente masivo
que podrá ser exportado. El restablecimiento y desarrollo de las diversas
fuentes de energía convertirán a Venezuela en un actor internacional de primer
orden, y abastecedor seguro de los países que pueden beneficiarse del potencial
energético del país.
Se implementará un programa
de gas domiciliario por tubería progresivamente en las
ciudades del país aprovechando el incremento de la explotación del inmenso
potencial de gas que tiene Venezuela, a través de una combinación
prioritariamente de inversión privada y de aplicación del programa de inversión
pública en infraestructura en los casos que no sean comercialmente rentable.
REFERENCIAS
BREVE
HISTORIA DEL DR. MIGUEL RODRÍGUEZ
https://juanguzman88.blogspot.com/2023/05/breve-historia-del-dr-miguel-rodriguez.html
VENEZUELA TIERRA DE GRACIA
La propuesta de María Corina
para transformar Venezuela
https://linktr.ee/venezuelatierradegracia
The Gulf Aluminium
Industry: A legacy of 5 successful decades, 6 aluminium smelters
The impact of the
aluminium sector on the UAE economy
PLANIFICACIÓN DEL SECTOR ALUMINIO EN
VENEZUELA
https://juanguzman88.blogspot.com/2022/05/planificacion-del-sector-aluminio-en.html